Parte de mi deuda con la literatura argentina

Fue Roberto Artl el primero de los escritores argentinos que leí. Seguramente porque vi en el cine una película titulada "Los siete locos" de su compatriota Leopoldo Torre Nilsson, versión de su novela, además ,y para asombro de quién lo lea, estrenada en un cine comercial.
La poesía de "La rosa blindada" de Raúl González Tuñón también fue otra de mis primeras lecturas.
Luego cayó en mis manos "Triste, solitario y final" de Osvaldo Soriano, autor al que procuré seguir leyendo en sus novelas sucesivas.
Por supuesto Cortazar, pero el Cortazar de sus artefactos literarios como "La vuelta al día en ochenta mundos" o "Historias de cronopios y de famas", prefiriendo la novela "El libro de Manuel" a "Rayuela".

Comentarios

Entradas populares